Arqueólogos pertenecientes al programa de capacitación en gestión del patrimonio de emergencia de Irak han descubierto una antigua y larga ciudad perdida fundada después de conquistas de Alejandro Magno en Irak.
Gracias a la fotografía de drones, los arqueólogos han descubierto una ciudad perdida durante mucho tiempo, de 2.000 años de antigüedad, gobernada por Alejandro Magno en Irak.
¿Por más de 2.000 años esta antigua ciudad se mantuvo oculta de la civilización? Ahora, gracias a las imágenes militares desclasificadas y la fotografía Drone, los expertos han identificado la ciudad perdida de Qalatga Darband que Alejandro Magno conquistó hace más de 2.000 años.
El descubrimiento fue realizado por un esfuerzo conjunto entre arqueólogos iraquíes y británicos liderados por expertos del British Museum.
Hablando a The Times, el investigador principal John MacGinnis dijo: "el Dron dio una excelente información", dijo el Dr. John MacGinnis, arqueólogo líder del programa, a The Times.
"Es de los primeros días, pero pensamos que habría sido una ciudad bulliciosa en un camino de Irak a Irán." Se puede imaginar que la gente que suministra vino a los soldados de paso.
El yacimiento arqueológico capturó el interés de los investigadores después de que las imágenes desclasificadas tomadas en el 1960 fueron lanzadas por la CIA, describiendo claramente las ruinas antiguas.
Los informes sugieren que los arqueólogos han descubierto un número de artefactos incluyendo monedas griegas, y estatuas de deidades greco-romanas.
Los investigadores que participaron en el descubrimiento formaron parte del programa de capacitación en gestión del patrimonio de emergencia de Irak, creado con el fin de ayudar a los investigadores de la región a proteger lugares de importancia histórica en zonas del Oriente medio que han sido gravemente afectadas por el conflicto, informa The Independent.
Muchos medios de comunicación están afirmando que la ciudad fue fundada por Alejandro Magno, sin embargo, según los informes de IFLScience, este no es el caso, y que la antigua ciudad fue, de hecho, fundada en la estela de sus conquistas.
Además, los arqueólogos creen que la antigua ciudad fue fundada después de que Alejandro Magno marchó en 331 A.C. mientras perseguía a Darius III de Persia.
Los restos de la antigua ciudad se encuentran a unos 10 kilómetros al sureste de Rania en el Kurdistán iraquí.
"Una inspección de tierra en el lugar reveló la presencia de un vasto número de bloques de piedra caliza tallada, junto con pesos y bases de un tipo asociado con las prensas de vino o aceite", dijeron expertos en un informe de prensa del British Museum. "Por lo tanto, era evidente que quedaba considerable importancia enterrada en el lugar."
Además de los numerosos artefactos y bloques de piedra caliza que se han recuperado del sitio, los arqueólogos están convencidos de que "alguien importante" puede haber sido enterrado en el sitio.
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