¿Qué haces cuando estás en una cafetería y terminas de tomar café? Tiras el vaso desechable a la basura, ¿cierto? Pero ahora la ciudad de Friburgo, Alemania, viene con una solución inventiva.
Crearon la Taza de Friburgo, que los amantes del café pueden conseguir por un euro y volver a las tiendas participantes para ser limpiada y utilizada de nuevo, hasta 400 veces.
En Alemania, más de 300.000 tazas de café desechables se consumen cada hora, según los representantes de Friburgo. Y las 2,8 mil millones de tazas desechables consumidas un año requieren 43.000 árboles, 320 millones kilovatios-horas de electricidad, 1,5 mil millones litros de agua, y 3.000 toneladas de petróleo crudo – por no mencionar que muchas ni siquiera son recicladas.
Y estas tazas intensivas en recursos son típicamente usadas por apenas 13 minutos antes de ser botadas . La ciudad lanzó la Taza de Friburgo hace alrededor de un año, y ahora hay alrededor de 107 panaderías y cafés que participan. Las tazas se fabrican en Alemania meridional.
Los bebedores de café pueden obtener la taza plastificada y libre de BPA, compuesta de polipropileno reciclable en cafés participantes, identificable por una pegatina verde en la ventana. Cuando hayan terminado la bebida, pueden devolverla a cualquiera de esos cafés, que desinfectarán los recipientes.
La ciudad no ofrece una tapa reusable, por razones financieras e higiénicas, dijeron. Pero parecen pensar que las tapas desechables tienen una buena probabilidad de ser recicladas – cuando la taza es devuelta para la limpieza, las tapas se colocan en una bolsa amarilla para el reciclaje.
Hasta el momento la Taza de Friburgo ha sido increíblemente exitosa, con otras ciudades del país que expresan interés. Los bebedores de café pueden encontrar las ubicaciones de los cafés participantes en la Página Web de la Taza de Friburgo.
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