Una grúa grande de correa eslabonada que era utilizada para construir una sección del acueducto en Italia se derrumbó el martes.
Afortunadamente, nadie resultó herido, pero usted puede obtener una idea de cómo se deben haber sentido los trabajadores al ver su trabajo derrumbarse sin poder hacer nada al respecto y duele más ir escuchando los gemidos de los trabajadores de la construcción en las secuelas:
De acuerdo con VertiKal, un blog de grúas, el operador de la grúa fue capaz de saltar justo cuando empezó a volcarse. Un buen golpe de suerte en una situación de otra manera extremadamente desafortunada.
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