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jueves, 30 de noviembre de 2017

¿Por qué tus abuelos no tienen alergias alimenticias pero tu si?

La mayoría de la gente no recuerda a sus abuelos y a los abuelos de sus amigos quejándose de las alergias de la misma manera que lo hacemos hoy. 


La epidemia de alergias alimentarias ha empeorado a través de cada generación. 

¡Y basado en un estudio publicado en 2013 por los centros para el control y la prevención de enfermedades, las alergias alimentarias entre los niños crecieron alrededor del 50% entre 1997 y 2011!

Muchos argumentan que la alergia alimentaria o la prueba de sensibilidad alimentaria no fue frecuente en el pasado y que menos personas se preocuparon por estos temas como lo hacen hoy. Ese podría ser el caso, pero lo más probable es que no.


Aquí están algunas de las razones por las cuales sus abuelos no tenían alergias alimenticias, pero usted sí:

1. comidas caseras

Era una norma cocinar en casa, haciendo recetas desde cero. Comer comida procesada era rara vez una opción, y comer en el restaurante local era un lujo raro. Afortunadamente para nuestros abuelos estos hábitos simples también aumentaron su salud.

2. Todo era comestible

Era normal comer todo el animal, incluyendo los caldos de huesos ricos en minerales y las carnes de los órganos. Los huesos de los animales eran recolectados o comprados para hacer sopas y caldos, y las carnes de los órganos siempre tenían un lugar en la mesa de la cena. Estos alimentos fueron apreciados por sus propiedades medicinales y nunca se desperdiciaron.

3. Alimentos estacionales

A principios de 1900, la comida procedía de granjas y pequeños mercados. Los preservativos de alimentos eran menos utilizados, que dieron lugar a productos alimenticios más frescos. Como apenas había cualquier alimento procesado disponible, sus dietas fueron basadas en los alimentos de temporada verdaderos, que les permitieron conseguir todas las vitaminas y los minerales que requirieron de su alimento. Los bebés solían beber leche materna, que siempre estaba en temporada.

4. Menos dietas de moda

En aquel entonces, nuestros abuelos no jugaban juegos restrictivos con su cuerpo y metabolismo. Comieron lo que estaba disponible para ellos. No tenían tantas dietas de moda, conteo de calorías, comercialización de alimentos y otros hábitos alimenticios dañinos que son comunes hoy en día. Debido a esto, tenían un metabolismo sano y comían basado en las necesidades y los antojos de su cuerpo.

5. No comían nada genéticamente modificado

No comían transgénicos, aditivos alimenticios, estabilizadores y espesantes. El alimento no fue tratado con antibióticos, estabilizadores, y hormonas. Estos aditivos permiten que los alimentos duren más tiempo en estantes (lo que ayuda a las empresas a ganar más dinero), pero no hace nada bueno para nuestra salud.

6. Pasar el tiempo al aire libre

Pasar tiempo fuera en parques y la naturaleza era una visita obligada en el pasado. Nuestros abuelos no tenían juegos de video, smartphones, y computadoras, que se necesitan para socializar y salían a los parques para el entretenimiento. Solían andar en bicicleta, nadar, y disfrutar de la naturaleza mucho más de lo que hacemos hoy, lo que los hizo más en contacto e inmunes a los cambios estacionales.

7. Menos visitas médicas

Otro dato interesante es que no era común visitar al médico cada vez que nos sentíamos enfermos y recibir medicamentos recetados. Las visitas al médico eran sólo por lesiones accidentales y enfermedades potencialmente mortales.

Cuando se sentían enfermos, comían caldos, sopas, y descansaban mucho. Cuando sintieron el inicio de una fiebre, la combatieron. Creían en el proceso de curación natural de su cuerpo más de lo que hacemos hoy. La comida era medicina para entonces, no importaba si lo reconocían o no.

Pruebe esta deliciosa y sencilla receta de caldo – caldo óseo casero.

Entonces, ¿qué tienen que ver estas cosas con las alergias a los alimentos?

La nutrición afecta a todas las células del cuerpo. La salud de sus células depende de su dieta y estilo de vida. Las células son responsables de crear tejidos y tejidos para formar órganos. Estamos hechos de un sistema de órganos. Si su dieta es débil, la integridad de cada célula, tejido, y órgano en su cuerpo sufrirá. Por lo tanto, usted se vuelve más sensible a ciertos alimentos y se encuentra con alergias.

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