Descubren propiedad del grafeno que podría llevar a una energía limpia infinita.

Un equipo de físicos de la Universidad de Arkansas han descubierto una nueva propiedad del grafeno que podría ser explotada para generar energía limpia sin fin. 

Mientras investigaba la capacidad del grafeno para ondular y sacudirse, el físico Paul Thibado y un grupo de estudiantes graduados descubrieron un comportamiento previamente desconocido en el cual el material maravilloso se abrocha y tuerce en pequeñas fluctuaciones aleatorias, lo que potencialmente permite que el grafeno pueda ser utilizado como fuente de energía ambiental. 

Cuando se agregan dos electrodos a ambos lados de una hoja sutilmente temblorosa de grafeno, se produce un pequeño voltaje de desplazamiento – y se puede magnificar para uso práctico a través de capas.

Este nuevo descubrimiento se hizo en el transcurso de una exploración bastante mundana de la tendencia conocida del grafeno a sacudirse. 

Es este movimiento aleatorio de átomos que permite que el grafeno casi 2D funcione como un material 3D. Para estudiar este comportamiento, los estudiantes colocaron hojas de grafeno sobre una rejilla de cobre y observaron el movimiento atómico a través de un microscopio de barrido de túnel. 

"Los estudiantes sintieron que no íbamos a aprender nada útil", dijo Thibado, "Pero me preguntaba si estábamos pidiendo una pregunta demasiado simple". Los estudiantes entonces buscaron un patrón en el movimiento del grafeno. "Mirar los promedios a gran escala escondía los diferentes patrones." Cada región de una sola imagen, cuando se ve con el tiempo, produjo un patrón más significativo ", dijo Thibado.

Según Futurism este patrón significativo de pequeñas fluctuaciones aleatorias que resultan en cambios dramáticos se conoce como un vuelo de Lévy. 

Aunque el fenómeno se había observado previamente en biología y en estudios climáticos, esto marca la primera instancia en la que se observó a nivel atómico. 

Estos movimientos permitieron la producción de una pequeña tensión dentro del grafeno. Thibado estima que un solo trozo de grafeno de diez micras puede producir diez microvatios de energía. 

Aunque esto puede no parecer mucho, la capacidad del grafeno de ser estratificada en gran medida incluso en un espacio pequeño podría resultar en una carga eléctrica práctica, una que puede ser usada para alimentar bioimplantes. Thibado está trabajando con el laboratorio de investigación naval de Estados Unidos para investigar y desarrollar el concepto.