Ya era hora, los primeros trenes propulsados por hidrógeno del mundo acaban de hacer su debut mundial en las zonas rurales del norte de Alemania.
Desde el lunes pasado, dos locomotoras Coradia iLint transportan pasajeros de ida y vuelta a las ciudades de Bremervoerde, Buxtehude, Cuxhaven y Bremerhaven, al oeste de Hamburgo.
Estos trenes eficientes fueron producidos por los ingenieros franceses de transporte de Alstom, esos mismos fabricantes que dejaron perplejo al mundo a principios de los años ochenta con el tren bala.
El famoso TGV no solo captó la atención de mucha gente como la locomotora más rápida en la producción, sinó que su verdadera hazaña fue proporcionar una solución a la crisis del petróleo de 1973 en Francia con una transmisión eléctrica, no de gas.
Cuatro décadas después, Alstom ha vuelto de nuevo al rescate, debido a que las ciudades europeas siguen luchando contra la contaminación.
El primer paso es reemplazar los motores diesel que están estancados en la lucha de Alemania por el medio ambiente.
El CEO de Alstom, Henri Poupart-Lafarge, inauguró los dos nuevos trenes en una ceremonia de presentación en Bremervoerde, donde los trenes se someterán a una rutina de repostaje de hidrógeno.
El señor Poupart-Lafarge dijo: "El primer tren de hidrógeno del mundo está entrando en servicio comercial y está listo para la producción en serie".
Los trenes Coradia iLint de color azul brillante operan en la actualidade en un recorrido de 62 millas (100 kilómetros).
Sin embargo, en igual capacidad que sus contrapartes que tragan gas, los vehículos impulsados por hidrógeno pueden recorrer un tramo de 600 millas (1000 kilómetros) con un solo tanque de hidrógeno.
Los trenes dependen de pilas de combustible que pueden producir electricidad a partir de una mezcla combinada de hidrógeno y oxígeno.
Los modelos son muy eficientes en la conversión debido a que el exceso de electricidad puede ser sifonado en baterías de iones de litio almacenadas a bordo.
Lo mejor de todo es que los únicos subproductos emitidos por este proceso son el vapor y el agua.
Muchos estados alemanes han expresado su interés en adoptar los modelos para sus propias líneas de transporte.
La compañía anunció que entregará un conjunto de 14 trenes a la región de Baja Sajonia del país para el 2021.
Aunque las alternativas de emisiones cero son atractivas por su naturaleza más silenciosa y respetuosa con el medio ambiente y su capacidad para funcionar sin ferrocarriles electrificados, no carecen de un alto precio inicial.
Stefan Schrank, director del proyecto de Alstom, dijo: "Claro, comprar un tren de hidrógeno es algo más caro que un tren diesel, pero es más barato".
Es un precio que muchos países están dispuestos a pagar por un aire más limpio.
Francia planea enrrolar su primer tren de hidrógeno para el 2022, con el Reino Unido, los Países Bajos, Noruega, Dinamarca, Italia y Canadá deseosos de seguir su ejemplo.
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